Agustina trabaja en una consulta médica, y tienen un paciente ya mayor que está sordo, y hace poco le acompañó su nieto a la consulta, y tuvieron que esperar en la sala de espera un rato. Mientras Agustina y sus compañeros estaban en la consulta empezaron a oír como el abuelo se echaba unos gases, muy ruidosos. El nieto se moría de la vergüenza por que el abuelo no era consciente de lo que estaba haciendo. Cuando llegaron a la sala de espera olía fatal.