Y es que nuestra Vane no puede parar de liarla, si no es en el museo es en el metro, como ha pasado hoy. El problema es que ella vive justo en frente de una parada de metro y tiene todos los días obras en la puerta de su casa. Así que ha llamado a los del metro a ver si le dan alguna solución… ¿Habra conseguido algo?
LA VANE NO TIENE MEDIDA
Redacción Radiolé 13/09/2012, a las 12:51