Así es nuestro Rafael, que siempre que hablamos con él es imposible no reírse a carcajadas. Y es que sus historias son únicas, como la de hoy, que nos ha contado como fue la pedida de mano que le hizo a su mujer… fue (literalmente) encima de una mierda, un sitio muy romántico ¿verdad? La pobre estuvo oliendo así todo el día… ¡¡qué mala suerte!!
¡¡Rafael, el hombre que nos deja siempre sin palabras!!
Redacción Radiolé 27/07/2012, a las 10:27