El domingo se fue de excursión con su marido al monte de Cazorla de senderismo, al llegar arriba de la montaña les dijeron que tenían que bajar por un barranco. Sonia se quedó paralizada, su cuerpo no le permitía bajar, pero tenía que bajar por ahí si o si. Al final bajo pero rodando, en vez de ir de excursión parecía que se había pegado con un gato, por que del miedo que le daba, se tiraba rodando por las piedras, agarradísima a los árboles… etc
Una excursión convertida en deporte de riesgo
Redacción Radiolé 29/05/2012, a las 13:23