Lo que vivió Sonia Priego, la Húngara, el viernes no tiene nombre. Seguramente una de las situaciones más desagradables de su carrera profesional. Todo sucedía durante un concierto en Parla, en las fiestas, y justo cuando empezaba su concierto.
Los hechos ocurrían sobre las 23.20 tras una riña entre dos personas. El crimen se produjo detrás del escenario del recinto ferial durante la actuación de La Húngara y en un momento en el que había varios niños disfrutando de la atracción, de camas elásticas, por lo que se vivieron escenas de pánico. La víctima, de unos 48 años, ha sido atendida por los miembros de Protección Civil de Parla que se encontraba en el recinto ferial pero ha fallecido en el Hospital de Parla. Las primeras investigaciones apuntan a que el autor de los disparos es la ex pareja de la dueña de la atracción y no descartan que pudiera tratarse de un asesinato por celos, según cuentan en el diario El Mundo.
Una situación que no dejó indiferente a Sonia, La Húngara, que cuando se enteró de lo ocurrido se quedó, como ella dice, «blanca, sin palabras«. Algo que no hizo que el concierto parase ¡ni mucho menos! La Húngara siguió cantando y dándolo todo como siempre hace y dio lo mejor de ella en el escenario. Un concierto que además uno de los más esperados porque, como ella cuenta, «estaba loca por ver al público de Parla que es maravilloso y me hace disfrutar muchísimo«.
Desde luego nada ni nadie puede parar a esta fiera del escenario. Una vez que se sube y suena la primera nota musical Sonia, La Húngara, lo da todo y se olvida de cualquier problema que pueda tener. Disfruta y lo siente. Y eso hace que quién vaya a verla sienta la energía que sólo ella trasmite.
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