Hemos tenido que hacer un llamamiento para dar con Carmen de Valdivia, la señora que entró el 15 de mayo diciendo sólo que Café Olé es un programa precioso, precioso, precioso, precioso… Desde ese momento cada día se repite lo mismo. Lo mejor de todo es que esta señora nos ha contado su verano en Benidorm, sin callarse, sin permitir que nadie hable y con un discurso que ha sido, como poco, precioso!
Os presentamos a la culpable de que Café Olé sea un programa precioso
Marta Agüera 02/07/2015, a las 07:11