Todo empezó a los 15 años, cuando Saray vio al hombre más guapo del mundo en la feria de su pueblo… el mismísimo churrero. Ella se quedo prendida de él, pero hasta dentro de unos años no lo conoció como a ella le hubiera gustado… ¿Le habrá invitado a unos churros?
¡¡El destino estaba… en los churros!!
Redacción Radiolé 09/01/2012, a las 08:16