Los amigos de Mari Carmen y de su marido intentaron por todos los medios estropearles la noche de bodas a la pareja. Lo primero que hicieron fue subir a la suite en la que iban a pasar la noche a desordenarlo todo, metieron un perro, cambiaron toda la cama de sitio, llenaron las sábanas de polvos de talco, la nevera llena de azafrán… pero al final en el hotel tuvieron problemas con las suites y les dieron otra habitación que no era la que sus amigos habían desordenado. Cuando sus amigos se enteraron se fueron a la cafetería del hotel, a esperarles, estuvieron desde las 7 de la mañana hasta las 12 que se tenían que ir de allí en la cafetería, llamándoles a la pareja, diciéndoles que hasta que no les pagasen el desayuno no se iban de allí. Cuando se fueron del hotel y les dieron a factura del desayuno solo ponía: JB coca-cola, JB coca-cola…