Manuel Fernández

Manuel Fernández empezó a cantar a los seis años en un festival del Poblenou (en el que también actuaban Los Chichos o Bordón 4) cantando un tema de Las Grecas. Poco a poco se aficiona a la copla y tiene a Isabel Pantoja como una de sus principales fuentes de inspiración. Compagina el cante con el baile y actúa con grandes figuras del flamenco como el maestro Lebrijano (en ‘Tierra’). También se curte en tablaos como El Sacromonte, Tarantos y El Palacio del Flamenco, o en salas míticas como Scala de Barcelona. Además, participa haciendo coros en varios discos y desde 2001 colabora con la compañía de José de la Vega.

Dirige la asociación ‘Rincón del Arte y la Música de Badalona’ y la asociación de ayuda al pueblo saharaui ‘Esabar Saharaui Badalona Cooperación’, donde conoce al grupo de jóvenes saharauis que le inspiran para fusionar la música saharaui con el flamenco. Además de su faceta de cantaor, bailaor y cooperador, Manuel también ha presentado el programa de televisión ‘Flamenco y Copla’, entrevistando a primeras figuras del género.

En 2013, gracias a la intercesión del escultor Lluis Ventós, Manuel se pone en contacto con el grupo de vanguardia The Pinker Tones para producir su debut discográfico. El resultado es “Por Arte de Magia” (2014), con versiones de Federico Garcia Lorca (“La Tarara”), Juan Peña Lebrijano (“Granate”), Quintero León y Quiroga (“Pena, Penita, Pena”), Enrique Morente (“Amor mío”) o Ray Heredia (“Lo bueno y lo malo”).

En su segunda grabación "Siete destinos" (2016), Manuel ofrece un trabajo más personal, una colección de 10 canciones compuestas por él mismo o por otros autores amigos. Su sonido es más ecléctico y tiene numerosas influencias: no faltan coros saharauis, melodías latinas, solos jazzísticos, guitarras españolas, violines, trompetas, además de las palmas y el duende, esencia del flamenco. El primer single es el tema que da título al disco, “Siete destinos”.

A principios de 2018, y tras varios meses de elaboración, ve la luz el tercer álbum del artista barcelonés “Alma de papel”. De nuevo, Fernández muestra su evolución con un trabajo ecléctico y variado sin abandonar su estilo. Introduce nuevos instrumentos, nuevos autores y nuevos estilos que van desde el reggaetón a los tangos flamencos o rumberos, pasando por fandangos de Huelva, bulerías, bolero... El primer single es “Arianna”, una rumba con “mucha marcha”.